El vicepresidente Jorge Glas explicó que la prioridad ahora es rescatar y atender a los heridos. "Fuerza y fe, para superar este desafío".
El vicepresidente ecuatoriano, Jorge Glas, solicitó a la población mantener la calma y apegarse a la información oficial que reporte el Estado, en aras de mejorar la atención a los heridos y afectados.
Asimismo remarcó que no hay alerta de tsunami, ni que tampoco existe afectación en las represas por causa del terremoto.
Glas explicó que el Gobierno ha destinado los recursos que se requieren, "son 300 millones de dólares disponibles para contingentes de esta naturaleza", dijo.
El funcionario añadió que toda la fuerza pública, el sistema de salud y todo el sistema de control de riesgo se mantienen al servicio de la ciudadanía. "Son momentos difíciles pero también de unidad", sentenció.
"Queridos y queridas ciudadanas, fuerza y fe, vamos a superar esto y estamos todos comprometidos con este nuevo desafió que nos impone la naturaleza a todo el pueblo ecuatoriano", manifestó.
"Hemos articulado todos los mecanismos de respuesta desde el momento que se reportó el sismo", afirmó.
El vicepresidente en conferencia indicó que la prioridad es el rescate de ciudadanos y la atención de los heridos.
"Estamos todos comprometidos ante esta emergencia nacional con profunda unidad, las naciones fuertes surgen en los momentos difíciles, este es el momento de unidad y solidaridad", subrayó.
Glas también aprovechó la ocasión para extender un agradecimiento a toda la rápida colaboración de Venezuela, Colombia, México, Perú, España y la Unión Europea, todos comprometidos "con el envío de recatistas especializados con herramientas, tecnologías y también raciones especiales alimenticias para este tipo de situaciones".
El político, además, agradeció a los gobiernos autónomos descentralizados del país que se han presentado en las regiones afectadas con maquinarias, alimentos, carpas, rescatistas, personal de primeros auxilios y demás para atender a los ecuatorianos.
Al concluir, el vicepresidente envió "un sentido abrazo" a todos aquellas personas que han perdido a sus seres queridos en la catástrofe.
El funcionario ecuatoriano indicó que se dirigirá a la ciudad de Pedernales para ayudar en las labores de rescate y coordinar la logística necesaria.
Una ONG informa sobre la situación que viven los ciudadanos en Ecuador, tras el desastre.
En contexto
A causa del terremoto de magnitud 7,8, el más intenso que ha vivido Ecuador desde 1979, el vicepresidente Glas informó que además de haber decretado de Estado de Excepción, se dispuso la máxima alerta en el sistema de salud.
Las zonas de mayor afectación son las provincias Manabí, Guayas, Esmeraldas, Santa Elena, Santo Domingo y Los Ríos.
Glas pidió a la ciudadanía mantener la calma y remarcó que lo primero es la seguridad. Que no regresaran a los lugares de derrumbe para rescatar sus pertenencias.
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